Predecir el futuro… Algunos dirían que es imposible!
Sobre todo teniendo en cuenta la crisis global en la que estamos sumidos… y a la que hemos llegado sin darnos cuenta…
Las constantes interacciones de los interlocutores, así como la tecnología influyen directamente en los cambios que vivimos. Cada cambio se retroalimenta entre sí… y nos lleva a mayores cambios.
Pero ¿qué tipo de empresas van a cambiar realmente? ¿Cómo van a manejar sus negocios? ¿Cómo pueden seguir destacando?
Pienso que las empresas, en la actualidad, deberían invertir/escuchar
las experiencias de sus clientes. Las experiencias son parte de la nueva ‘relación’.
Las buenas experiencias crean los buenos recuerdos, y los
recuerdos son lo que hablamos con los demás.
Tengamos en cuenta que será lo que compartamos tanto en persona como en
las redes sociales.
En mi opinión, esta teoría se aplica a cualquier situación en los negocios, así como a cualquier situación humana. Tal vez el largo y difícil camino que tenemos por delante lo podamos enfocar de forma diferente, como una oportunidad para ser conscientes de que lo que antes se podía quedar en un círculo pequeño, con las nuevas formas de comunicación, puede adquirir una dimensión global.
Llegarán nuevas experiencias. Estamos con la realidad aumentada, Google lanza Google
Gloves
y GoogleGlass.
Subir a un avión para saltar al otro lado del planeta no es
una experiencia tan diferente como en su día, en el año 1.848 lo fue tomar
un tren de Barcelona a Mataró.
¿qué nos depara el
futuro?